Era un Jueves por la noche, la noche del espectador. Pero todavia no habia caído en eso, en que el cine era a mitad de precio.
Todavia me encontraba en casa, despues de cenar. Me fumé un piti mientras miraba la TV y me daba cuenta de lo bien que me habia sentado la cena y lo bien que cocinaba mi compañera de piso.
Pero las 4 paredes de aquella cocina-comedor se me hacian pequeñas, se me caían encima.
Así, que sin dudarlo me fui a dar una vuelta, bajo la luna, a donde el viento me llevara. Ya volveria mas tarde... Y fue entonces, cuando andando por las calles vi un cartel, anunciando los Jueves el dia del espectador, que las entradas al cine, eran la mitad del precio normal. Así que sin dudarlo, me presenté ahí.
La verdad es que no habia apenas nadie, estaba bastante muerto, pero me daba igual. Pagué para la próxima peli que iban ha hacer, en 10 minutos empezaba.
Compré una de palomitas medianas y una Coca-Cola grande y me dirigí a la sala, sin hacer mucho caso al ticket, el numero de asiento que me ponía, me senté donde quise... A pocas filas de arriba del todo y a la izquierda.